Si os quedáis un par de días por Kioto, tenéis varias visitas desde allí muy recomendables, como bien os indique anteriormente que era el caso de Kanazawa. Hoy os vengo a hablar del castillo de Himeji, conocido como la garza blanca de Japón. Título más que merecido por el castillo más bonito del país.
Apenas una hora en tren desde Kioto tenéis Himeji, famoso por su castillo construido en 1333 por Akamatsu Norimura. Dos siglos más tarde fue Toyotomi Hideyoshi cuando el castillo sufrió reformas y fue ampliado.
El famoso Tokugawa Ieyasu se apoderó del castillo en 1600 y se lo entregó a su yerno. Con él se decidió el reformarlo y ampliarlo de nuevo, adquiriendo la maravillosa forma que podemos apreciar hoy en día.
Una de las curiosidades sobre el castillo de Himeji es la de que nunca fue tomado por la fuerza, ni siquiera destruido. Cuando se abolió el sistema feudal en 1871, el castillo se puso a subasta y lo compró un hombre de la ciudad por 23¥ de la época. Este señor quería demolerlo pero como el coste para llevarlo a cabo era tan alto, decidió dejarlo como estaba.
Himeji sufrió ataques aéreos durante la Segunda Guerra Mundial, y aunque parezca mentira viendo donde se encuentra el castillo, este no sufrió ningún daño a pesar de que hasta en tres ocasiones fue bombardeado. También la edificación se mantuvo en pie tras el horrible terremoto de Kobe en 1995 y eso que la ciudad si sufrió muchos daños.
Hoy en día es patrimonio de la Unesco y el castillo blanco se mantiene inmortal al paso del tiempo, es impresionante.
Cuando llegas cerca de donde se encuentra el castillo, es imposible mantener la boca cerrada de lo espectacular que llega a ser a simple vista.
Lo siento, no entramos dentro. Ya nos habían recomendado por activa y pasiva que decepciona mucho el interior. Entrar cuesta 1,000¥ y ni siquiera parece que se puede apreciar como era la vida allí.
Lo espectacular es el exterior y también tenéis los jardines cerca del castillo llamados Kokoen Gardens. La entrada del castillo más la de los jardines quedará en 1,040¥ .Pero como he dicho, lo realmente precioso es ver el castillo en todo su esplendor desde fuera.
Realmente solo queríamos dedicar una hora para visitar Himeji, así que dimos una vuelta por los alrededores y nos paseamos por la calle comercial, gran error porque había mucha tentación, entre ellas un café tematizado de Hello Kitty que era muy difícil resistirse, pero por tiempo, no entramos, sino, de cabeza que iba.
Himeji es una excursión ideal si tenéis el JR Japan Rail Pass y estáis en Kioto. Así por la tarde podéis hacer otra excursión para aprovechar el día, que en nuestro caso fue a Inari, pero eso lo dejo para otro artículo.
¿Cómo llegar desde Kioto?
Recordad, si viajáis con la Japan Rail Pass podéis coger los trenes: Sakura, Hikari y Kodama, nunca el Nozomi. Tardáis aproximadamente 55 minutos en llegar a Himeji.
Si no tenéis el JR pass el billete ida y vuelta Kioto a Himeji cuesta unos 4,500¥ y trayecto dura 90 minutos. Pero siempre recomendaré encarecidamente que adquiráis el JR Pass para vuestro viaje por Japón, sale muchísimo más rentable.
