Durante el mes de febrero descubrí que el Bioparc en Valencia ofrece un muy buen descuento para sus Pase Anuales, además de sus entradas online, y decidí que era la mejor excusa para disfrutar cuando quisiéramos de visitar el lugar ahora que está el peque conmigo. Así que ahora visitar a los animales se ha convertido en un plan ideal para ir cuando nos apetezca el resto del año.
La verdad es que hace años teníamos el zoológico en Valencia y era una total crueldad ver como tenían allí a los animales, al igual que estoy totalmente en contra de los circos. Así que podría ser un poco hipócrita querer llevar a mi bebé a un lugar donde tienen encerrados a los animales. Pero las instalaciones del Bioparc tienen algo diferente.
Por si no lo conocéis, uno de los propósitos del Bioparc es transmitir su lema conservacionista y sostenible, además de ser tremendamente educativo para los más pequeños, y de paso también para los que no lo somos tanto.
Aunque no es tan grande como otros Parques, como puede ser el de Cabárceno en Cantabria, este no se queda corto al ver como recrean los hábitos para asegurar de algún modo el bienestar animal con todos los cuidados, es más, hemos podido ver el nacimiento de muchas crías aquí.
Durante todo el emplazamiento veremos como intentan transmitir unas zonas sin barreras, a pesar de que veremos que la vegetación y los troncos juegan un papel para que no nos acerquemos a los animales demasiado, o en el caso de otros como los leones, nos separan de ellos unas mamparas de cristal que intentan no alterar el ambiente.
El Bioparc se divide en varias zonas como son los bosques del África ecuatorial, la sabana seca, la sabana húmeda y Madagascar. Se intenta en todo momento advertir que no se altere a los animales, ni tocarlos ni darles de comer, y en ocasiones los niños son los más conscientes de estas reglas.
Hacen algunas actividades los fines de semana, aunque yo explico las de esta temporada, que no suele ser la alta por ello lo de fines de semana. Una de la que más hemos disfrutado es él: Buenos días jirafas.
El Bioparc abre sus puertas a las 10:00 de la mañana, por lo que sobre las 10:30 una especialista en jirafas, nos hablará de las tres que habitan allí y veremos cómo entran a la zona de la sabana donde las veremos paseándose tranquilamente. Es todo un momento que hará las delicias de todos.
Hay otras experiencias y espectáculos, como por ejemplo las que se realizan en el anfiteatro pero todavía no hemos ido, así que puede que en otra ocasión amplíe el artículo para hablar de ello.
El Bioparc es ideal también para ir con cochecitos de bebé, ya que está habilitado en todo momento para desplazarse, otra cosa es cuando hay aglomeraciones de gente y hay atasco de cochecitos, pero todo es armarse de paciencia.
En la zona de Madagascar no se permite entrar cochecitos de bebé, por lo que hay habilitado un parking de carritos fuera pero si no os fiáis de dejar vuestro cochecito podéis llevaros un candado y ponerlo, aunque dudo que nadie se quiera llevar el carrito de otra persona, nunca se sabe.
Noah disfruta mucho de estas visitas, todavía no se fija demasiado porque apenas ha cumplido los 10 meses, pero en cada visita se sorprende más y más, aunque desde el principio le llama más la atención esa especie llamada humanos jaja.
Por lo del descuento, todos los meses de febrero se realiza este descuento así que es genial comprarlo ahora e ir renovando siempre con el mismo precio. Además, durante el mes de enero el Pase Anual para los niños es gratis! Solo se abona los gastos de gestión y el euro para la fundación. ¿Tentador verdad?
Y vosotros, ¿habéis visitado el Bioparc?
